Este 29 de marzo Reino Unido iniciará salida de la EU
El miércoles 29 de marzo será el día en el que Theresa May, primera ministra de Reino Unido, activará el artículo 50 del Tratado de Lisboa, el mecanismo que da inicio al proceso de salida del país de la Unión Europea, acatando el mandato popular emitido el 23 de junio del 2016, a través de un referéndum llamado “Brexit” en el que el 52% de los ciudadanos votó a favor de la salida de este país del bloque económico europeo.
Según el comunicado emitido por el gobierno británico, el embajador ante la UE, Tim Barrow, informó al presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, esta fecha en la invocará el artículo.
“Todo está listo por nuestra parte“, respondió el portavoz de la Comisión Europea, el ejecutivo comunitario, Margaritis Schinas. “Estamos listos para comenzar las negociaciones“, agregó.
Tras la activación del artículo Tusk presentará “en 48 horas” un borrador con las grandes líneas de negociación.
Los 27 Estados miembros restantes determinarán su postura en las negociaciones en tres pasos: una cumbre extraordinaria de jefes de Estado y gobiernos decidirá las líneas generales en las próximas semanas y sobre esa base la Comisión Europea propondrá el comienzo de negociaciones que tendrá que confirmar después es el Consejo.
En los próximos meses se presenta una tarea ingente para británicos y europeos, que deberán hablar de unas 21.000 regulaciones y leyes de la UE, informó la web “Politico” citando informaciones de comisiones del Parlamento Europeo. En los 500 días laborales que habrá hasta la salida del país del bloque, los negociadores tendrán que trabajar en unas 40 leyes cada día.
Especialmente complejo y controvertido es el tema de los derechos de los casi tres millones de trabajadores de otros países de la UE en Reino Unido, sobre los que Londres quiere negocia lo antes posible a cambio de garantías similares para los en torno a un millón de británicos que trabaja por su parte en otros países de la Europa continental.
Otro tema complicado es el económico: a Reino Unido se le podrían exigir 60.000 millones de dólares, según algunos expertos, entre otros en concepto de obligaciones de la UE asumidas también por Londres, según dijo recientemente el portavoz de la Comisión Margaritis Schinas.
Está previsto que las negociaciones concluyan antes de otoño (boreal) de 2018 para que haya tiempo de ratificar a tiempo el acuerdo. Por parte de la UE, deben dar su visto bueno el Parlamento Europeo y el Consejo Europeo.
May presentará el acuerdo también al Parlamento británico, pero dijo que no se renegociará después de hacerlo. Si los diputados lo rechazaran, se produciría un “Brexit” desregulado que tendría graves consecuencias, según han alertado numerosos economistas.
El ministro de Exteriores de Reino Unido, Boris Johnson, sin embargo, considera que incluso una marcha sin acuerdo estaría “perfectamente ok”.
Davis señaló que el Gobierno de May pretende llegar a un acuerdo que “funcione para todo Reino Unido y para toda Europa”. “Una nueva positiva alianza entre Reino Unido y nuestros amigos y aliados en la Unión Europea”, señaló.